miércoles, 21 de mayo de 2025

Los charros franchutes

 


Los charros franchutes 


Hacía principios de siglo [XX] se asentó a tal grado la influencia musical europea, que casi no se escuchaban más que canciones italianas y francesas (algunas de ellas hechas en México). La situación fue descrita por Manuel M. Ponce en estos términos: "La música vernácula agonizaba en las perdidas rancherías del Bajío... Sufría el desdén de los compositores más prestigiados y se escondía como chicuela avergonzada, ocultando su origen plebeyo a las miradas de una sociedad que solo acogía en sus salones a la música de procedencia extranjera y con título en francés. Hubiérase juzgado un enorme atentado contra su majestad el chic, la intromisión de una canción vulgar en el programa de una esplendorosa soirée." 

En 1901, el pianista y compositor Miguel Lerdo de Tejada, hombre extremadamente inquieto y emprendedor, fundó su Orquesta Típica y vistió de charros a sus músicos para distinguirlos de quienes sólo interpretaban música europea. Sin embargo, la tendencia imperante era tan fuerte que ni el mismo Lerdo de Tejada logró escapar de ella. Los músicos charros causaban admiración, pero de sus instrumentos seguía fluyendo música de estilo europeo. El propio Lerdo compuso muchas canciones (Perjura, la más popular de ellas) en las cuales la calidad es tan elevada como obvia su inspiración europeizante. 

Durante los últimos años del régimen de Porfirio Díaz, la Orquesta Típica de Miguel Lerdo de Tejada fue vista como fidelísima intérprete de la música mexicana e incluso viajó al extranjero con la misión de darla a conocer "en todo su valor". Pero esas pulcras interpretaciones no representaban la exaltación sino la mediatización de la canción popular de México.


(Tomado de: Morales, Salvador y los redactores de CONTENIDO - Auge y ocaso de la música mexicana. Editorial Contenido, S.A. México, 1975)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario