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jueves, 6 de marzo de 2025

Juárez acelera las operaciones sobre México, 1860

 


Juárez desea se aceleren las operaciones sobre la ciudad de México, 1860 


Teúl, noviembre 13 de 1860.

Excmo. Sr. don Manuel Doblado.

Guanajuato 

Muy señor mío y amigo:

Acabando de recibir la apreciable suya ha llegado también un extraordinario de Guadalajara que trajo varias noticias importantes para todos los jefes que actualmente figuran en beneficio de la actual revolución, una de ellas alarmante por las complicaciones que pueden resultar por el negocio de la ocupación de la conducta de platas y otras muy favorables respecto al giro -que la unidad y energía de los jefes han sabido mostrar- para salvar circunstancias muy críticas, cuyo curso habría desnaturalizado en totalidad los trofeos que nuestro partido ha conseguido por la unidad del Ejército Federal. Las primeras se refieren a que si no se indemnizan las sumas extranjeras de la conducta que se tomó, hay un conflicto, porque sabe que circula la noticia de una junta de Ministros extranjeros en Jalapa para tomar el partido que crean más ventajoso y será probablemente el apoderarse de los puertos de nuestra República. 

El señor Juárez, para evitar tal conflicto, quiere que se aceleren las operaciones de guerra sobre México y que, concluyendo pronto, pueda irse el grueso del Ejército Federal a impedir el golpe que se prepara; también hace una excitativa para impedir en lo moral tal golpe y ésta se refiere a que cada Gobernador se comprometa a satisfacer proporcionalmente al poder monetario de su Estado, un contingente que permita y sea susceptible de indemnizar en compañía las cantidades sustraídas y los daños y perjuicios a que la reclamación de dichos caudales pueda dar lugar. 

Las segundas consisten en que el Excmo. Sr. don Santos (Degollado) quiere sustraerse al ridículo que ha caído sobre él, así como también la censura que ante el Gobierno General y ante la Nación toda, se ha contraído por la ocupación de la conducta como por su malhadado plan que seguramente viene a complicar un tanto la situación; el tal modo consistió en un pronunciamiento que iba a efectuar mandando a Zaragoza, sin tener ya facultades para ello, que toda la fuerza la pusiera a las órdenes del Sr. (López) Uraga, a quien confería sus omnívoras facultades y le hacía observaciones muy exageradas con respecto a personas que si bien deben pagar con sus intereses, había de ser más bien por un conducto adecuado. Usted adivinará el resto, pues no se pueden encomendar a la pluma, cosas que por un extravío puedan interpretarse desfavorablemente. La persona contra que se procedía es Muñoz Ledo, a quien se debían intervenir sus bienes todos, para indemnizar los perjuicios ocasionados…

El Sr. Zaragoza desconoció el mandato de don Santos y respondió a Uraga dignamente lo mismo que a Mirabete, ayudante de don Santos, que venía de orden superior a encargarse de la comisaría. Todos estos golpes, dados en falso, lo han desconcertado a tal grado que no es posible sea capaz de aventurar nada nuevo. 

Se dice vagamente que (López) Uraga estaba en el complot dirigido desde que sé yo qué punto, creo que de México. 

Dos comunicaciones llegaron a la vez para las destitución de don Santos, una por la ocupación de la conducta, otra por el plan Mathew-Degollado. Todo esto es demasiado serio para verlo como un acontecimiento muy pasajero que sea superficial. 

Además ha llegado Francisco Cendejas, como comisionado del Sr. Juárez hacia González Ortega; no sé aún su comisión porque no quiso venir acá. Todo esto lo debe usted saber porque sus agentes son siempre mejores, pero lo informo yo por si usted no tuviere conocimiento de esto.

Muy de la aprobación del señor (González) Ortega ha sido la ejecución del pobre Patrón y desea que si Andrade está en igual caso se le aplique la ley. 

Hágame usted favor de saludar a Doloritas, a mi familia, la de Siliceo, a Prieto, etc. y, agradeciéndole y aceptando sus ofrecimientos, soy de usted su s. s.

José G. Lobato


(Tomado de: Tamayo, Jorge L. - Benito Juárez, documentos, discursos y correspondencia. Tomo 3. Secretaría del Patrimonio Nacional. México, 1965)

viernes, 13 de diciembre de 2019

Santos Degollado

Nació en la ciudad de Guanajuato en 1811. En 1828 llegó a Morelia, donde trabajó de escribiente en la Haceduría de la Catedral. Autodidacto ejemplar, llegó a formarse una vasta cultura. En 1835 se suma al movimiento liberal. Siendo gobernador de Michoacán don Melchor Ocampo (1846), fue designado secretario de la Dirección de Estudios del Estado; también había sido presidente de la Junta Directiva de Fomento de Artesanos; al reabrirse el Colegio de San Nicolás fue nombrado secretario del plantel, al que dio gran prestigio.  
Actuó en el Bajío, como uno de los principales sostenedores de la Revolución de Ayutla. Por riguroso escalafón pasó de soldado raso a general. Al triunfo del movimiento liberal, Comonfort le nombró gobernador y comandante general de Jalisco; participó en el Congreso Constituyente de 1856; en marzo de 1858 fue nombrado ministro de Guerra y Marina y general del Ejército Federal. Fue uno de los más esforzados paladines de la causa progresista; participó en múltiples batallas con espíritu denodado, aunque casi siempre con suerte desafortunada, por lo que se le llamó el Héroe de las derrotas y el Santo de la Reforma.
Destituido de su alto cargo, en 1860, y sometido a proceso, por entablar pláticas para pacificar el país, con el encargado de negocios de Inglaterra, George W. Mathew, en las que se planteó el reemplazo de Juárez como presidente y la reunión de un nuevo congreso.
Al ser fusilado Melchor Ocampo en Tepeji del Río, el 4 de junio de 1861, solicitó y obtuvo de la Cámara de Diputados que se le permitiera, a fin de salir al mando de una columna militar a batir a los conservadores y vengar la muerte de su hermano, el ilustre reformador. El 15 de junio de 1861, en el Monte de las Cruces, al trabar el primer combate con las fuerzas de Márquez, halló la muerte.

(Tomado de:  Tamayo, Jorge L. (Introducción, selección y notas) - Antología de Benito Juárez. Biblioteca del Estudiante Universitario #99. Dirección General de Publicaciones, UNAM, México, D. F. 1993)


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(Tomado de: Enciclopedia de México, Enciclopedia de México, S.A. México, D.F. 1977, volumen III, Colima-Familia)