lunes, 4 de noviembre de 2019

Bernal Díaz del Castillo


Nació en Medina del Campo, España, entre 1492 y 1493; murió en la ciudad de Guatemala hacia 1585. Pasó al Nuevo Mundo como soldado de Pedrarias Ávila o Pedro Arias de Ávila, gobernador de Tierra Firme (Nicaragua-Costa Rica). Fue a Cuba y participó en las expediciones de Francisco Hernández de Córdoba y Juan de Grijalba (1517-1518), y se alistó en la de Hernán Cortés. Al lado de Pedro de Alvarado, quien era su jefe inmediato, fue testigo y actor de la conquista, desde la salida del puerto de Santa María, el 18 de febrero de 1519, hasta la malaventurada expedición de las Hibueras (Honduras). Participó en los principales acontecimientos, presenció la sangrienta matanza de Cholula, vio la prisión de Moctezuma II, sufrió la derrota de la Noche Triste, tomó parte en el sitio y toma de México-Tenochtitlan y fue testigo del tormento de Cuauhtémoc. En más de una ocasión escapó milagrosamente de la muerte, y salió herido en la garganta en un ataque a Texcoco. Residió por algún tiempo en la Villa del Espíritu Santo de Coatzacoalcos, donde fue regidor. Embarcó a España en 1539 con el propósito de hacer valer sus derechos obtenidos en la conquista y con no poco trabajo consiguió que se le hiciera merced de un corregimiento en Soconusco. Volvió a México en 1541, y como la suerte le fuera adversa, resolvió ir a la ciudad de Santiago de Guatemala. En 1551 viajó por segunda vez a España, solicitando premios e implorando justicia, hasta lograr un corregimiento en la capital de Guatemala, en donde vivió el resto de sus días. Ya viejo, en 1568 terminó su Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España, en estilo “rudo y selvático”, según la calificó Marcelino Menéndez y Pelayo. Sin embargo, es una obra única en su género dentro de todas las literaturas. Cautiva tanto por la pujante rudeza de su estilo, cuanto por lo que el relato mismo tiene de deslumbrador y pintoresco. Presenta un cuadro completo de la conquista: sucesos, pormenores minuciosos, anécdotas, dichos célebres, descripciones de lugares, retratos de personajes, juicios, críticas punzantes, relaciones de peligros y fatigas, todo consignado con gran sencillez y sinceridad. Así como las obras de López de Gómara, Gonzalo de Illescas y Leonardo de Argensola exaltan a Cortés, atribuyéndole la gloria de la conquista, Díaz del Castillo hace hincapié en los méritos de los soldados y reivindica para la hueste el valor heroico de aquella hazaña. La razón que movió a Bernal Díaz a escribir su Historia fue la de rectificar a Francisco López de Gómara, teniendo a la vista su Historia General de las Indias. La obra de Bernal Díaz se publicó en Madrid en 1632 por fray Alonso Remón, cronista general de la Orden de la Merced, quien utilizó una copia enviada por el autor a España. Remón añadió al texto el relato de los hechos que supuso realizados por el mercedario Bartolomé de Olmedo, algunos recortes y ajustes, una conclusión, un epítome y el texto continuado -a causa de su muerte- por fray Gabriel Ardazo de Santander, obispo de Otranto. Una segunda edición se hizo en Madrid (1632-1665), a la que se añadió otro capítulo, “que es el último del original”. A partir de entonces se ha publicado muchas veces, utilizando el manuscrito original que existe en Guatemala. Son las más conocidas las ediciones de Rivadeneyra (Madrid, 1906), Espasa Calpe (1942 y 1955), Genaro García (1904) y Porrúa (1960). Ha sido traducida, además, al francés, inglés, alemán y búlgaro. v.Luis González Obregón: El capitán Díaz del Castillo, conquistador y cronista de Nueva españa. Noticias biográficas y bibliográficas (1894-1898); Genaro García: “Bernal Díaz del Castillo. Nota bio-bibliográfica” en Anales del Museo Nacional de Arqueología, Historia y Etnología (1903); Alberto María Carreño: Bernal Díaz del Castillo, descubridor, conquistador y cronista de Nueva España (1946); Jacinto Hidalgo: “El ideario de Bernal Díaz”, en Revista de Indias (Madrid, 1948); y Herbert Cervin: Bernal Díaz del Castillo. Historian of the Conquest (Norman, Okla., 1963).

(Tomado de: Enciclopedia de México, Tomo III, Colima-Familia; México, D.F. 1977)





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